Mal
Sense

Espíritu Empoderado

Mal Sense nace de una especie de retortijón de estomago de alguien que quiere dejar de hablar, para empezar a gritar.


De los integrantes más nuevos del grupo, la empezaron a llamar “La Mala” por su “parecido” a la Mala Rodríguez, pero irónicamente su personalidad fuera del escenario está muy lejos de ser mala. 

A través del rap, Mal Sense explora una nueva forma de expresarse: más bruta, más directa, más transparente, con menos filtros. Y le encanta.
En su primer EP, que saldrá dentro de poco, Mal Sense habla principalmente sobre las mujeres, queriendo conectar con el público con sentimientos de los que no se suele hablar.
Le encanta el royo feminista y del empoderamiento de la mujer. Su “spirit animal” es Bad Gyal.
Rehúye de los movimientos feministas más nuevos y complicados que se salen de la clásica base de “igualdad entre hombres y mujeres”.
Mi pasado se aleja bastante del rap, de hecho, lo conocí con el Colectivo y desde entonces no me despego. Nos conocimos en un parque en Berlín, un 1 de mayo. Había música en la calle.
Yo me acerqué hasta el grupo que ponía merenguito a echarme unos bailes.
De ahí conocí al Polvo, que me llevó al resto del grupo. Tuve una especie de adicción a la misa de rap de los domingos en un lugar con mucho encanto.
Los raperos se volvieron amigos, que se volvieron familia.